Hace cuarenta millones de años la naturaleza creó una montaña de sal en la zona de la actual Cardona, un fenómeno natural único en el mundo. Su explotación ya desde el neolíticofavoreció el desarrollo económico y social del territorio durante la edad antigua y propició que, a la edad media, fuera la cuna del linaje más rico de Cataluña: los Cardona.
Fueron los señores de Cardona quienes construyeron, en el siglo XI, el imponente castillo con la Colegiata de Sant Vicenç, joya del románico lombardo catalán, en un estratégico cerro desde el cual se puede ver desde los Pirineos hasta Montserrat.
El castillo está dividido mitad por mitad entre los pabellones señoriales y el recinto de la Canónica de Sant Vicenç. El castillo de Cardona constituye un excelente compendio
de fortificación militar que muestra la evolución de las artes militares desde la edad media hasta la época contemporánea.
A los pies del castillo se encuentra el pueblo medieval, un entramado de callejones estrechos con mucho encanto en el que conviven majestuosos casales y obras tan singulares como la iglesia de Sant Miquel.
Cardona, además, disfruta de parajes naturales de gran belleza que rodean el pueblo.
La Montaña de Sal, el castillo, el centro histórico y los parajes naturales, todos ellos son espacios aptos para realizar todo tipo de rodaje cuyos permisos deben gestionarse con la Fundación Cardona Histórica.
Francesc Ponsa
Director general de la Fundació Cardona Històrica
Carretera de la Mina s/n