Gaspar de Montenegro es un joven que vive obsesionado por el recuerdo de un antiguo amor que falleció debido a la intransigencia de sus familiares, que prohibieron la relación y frustró el noviazgo entre ambos. La figura de la muerte se le aparece continuamente agravando su carácter obsesivo y determinando su conducta. Gaspar adopta al hijo de su enamorada muerta.