Es un espacio de 9.200 metros cuadrados situado entre Cala Crancs y Cala Morisca, en un entorno único por las vistas, el paisaje y la vegetación al lado del mar, y con espectaculares acantilados. Esta zona, con diversos miradores hacia el mar donde había el conocido chalet de Pedrol Rius, se ha convertido en un rincón privilegiado que se incorpora al recorrido del Camino de Costa, con vistas inéditas a Cala Crancs y que bordea esta parte más abrupta del litoral de nuestro municipio hasta ahora poco conocida. La intervención de recuperación medioambiental de este espacio, pone en valor y protege una zona de gran interés natural y ecológico, y convierte este espacio privilegiado en un nuevo mirador al mar.