Actualizado: 05/10/2017
Finca Can Macià
08711
Òdena
Barcelona
Mas documentat des del s. XIV. Altres noms que ha tingut en el decurs de la seva història són: Mas Rossinyol, Mas Rossinyol de Moragues, Mas Aguilera del Pla i Mas Macià (a partir del segle XIX) amb el qual se’l coneix actualment.
Masía documentada desde el s. XIV. Otros nombres que ha tenido en el transcurso de su historia son: Mas Rossinyol, Mas Moragues, Mas Aguilera del Pla y Mas Macià (a partir del siglo XIX) con el que se le conoce actualmente.
La masía de Can Macià es una construcción autóctona catalana: tejado de dos vientos y paredes blancas de donde sobresalen las piedras que dibujan el marco de la puerta de acceso. Orientada al sur para recibir toda la luz de la jornada y con un reloj de sol que nos dice que el tiempo no se detiene.
La masía dispone de diferentes espacios destinados a la producción vinícola, la vivienda, los animales y una capilla fechada de 1927.
La casa solariega: Se conserva decorada con elementos de diferentes épocas. Sigue la estructura de la masía catalana donde en el primer piso tenían los establos a un lado y la cocina al otro lado, permitiendo calentar las habitaciones del piso superior, ubicadas también en los laterales de la casa.
En el piso superior, donde en sus orígenes se guardaba el grano, que hacía de aislamiento, ahora encontramos un desván-museo donde se coleccionan objetos antiguos.
La capilla: Es una construcción de estilo popular con un sabor historicista neogótico, que se constata claramente en la utilización de sillares bien cortados y regulares, y especialmente en los arcos ojivales de las aberturas del campanario y en los pináculos que culminan la estructura .
En el interior destacan unas pinturas murales sobre tela de regusto decimonónico, en altar mayor, realizadas en 1927 por Josep Pey, basadas en la tradición de la aparición en Barcelona de la Virgen de la Merced la noche del 2 de agosto de 1218 a san Pedro Nolasco, san Ramón de Penyafort y al rey Jaume I, por mandarles la fundación de un orden para redención de cautivos, los mercedarios. El altar está presidido por una imagen de alabastro de la Virgen de la Merced.