Adrià es un chico de 17 años que vive de pueblo en pueblo con su hermano mayor Ramon y la pareja de éste, Tona. Siempre huyendo.
Donde van, todos se ríen de Adrià, le insultan, le tiran piedras.
Y es que las noches con luna, Adrià no puede dormir. Y huele sangre. Y busca en los gallineros. Y se come las gallinas. Crudas.
Rodada en: La Sénia y Delta de l'Ebre.