La escuela Súnion, de educación secundaria y Bachillerato, abrió sus puertas al rodaje del documental, mostrando cómo el alumnado se organiza en grupos autogestionados de ocho adolescentes, que constituyen un “grupo natural”, su unidad básica de funcionamiento. A lo largo del curso, cientos de estudiantes de doce a dieciocho años deciden con quién quieren formar un grupo, trabajar, organizarse y compartir tiempo, clases y tutorías. Estas decisiones y dinámicas les confrontan de forma cotidiana con la realidad de sus relaciones, su integración o distancia con otras personas, y sus virtudes y defectos en una etapa en la que todos sus valores están en plena construcción.