Lidia y su padre, Pablo, vuelven al faro familiar después de la muerte de su madre en un accidente en alta mar. Pablo, pendiente del frágil equilibrio emocional de Lidia, se preocupa por una posible recaída por parte de su hija por su intento de suicidio. Lidia, molesta por la falta de confianza de su padre, descubrirá que “algo” está pasando en el Faro, y que un peligro les acecha si no averiguan la verdad. Lidia tendrá que enfrentarse a sus mayores miedos y hacer frente a la amenaza y los monstruos que se ciernen sobre ella, sobre su padre y sobre el Faro antes de que sea demasiado tarde.
Rodada en: Caldes de Montbui, Vallirana, Terrassa y Garraf - Sant Pere de Ribes