Mila y su pareja se mudan juntos a un pueblo de la Costa Brava. Tras una primera discusión Mila empieza a advertir que la pérdida de su deseo proviene de un lugar profundo y lejano pero propio. Sola en su casa familiar de veraneo, Mila revive algunas de las experiencias de su infancia y adolescencia; recuerdos que la ayudarán a entender el origen de su bloqueo para así poder ser capaz de reconciliarse con su propio cuerpo y tener una relación más honesta con quienes más ama.
Rodada en: Barcelona, l'Escala, Blanes, Garraf (Sitges), Maresme (Sant Vicenç de Montalt).
Premio a la mejor película europea de la Quincena de Cineastas de Cannes.